La nieve en la historia, Historia con Mayúsculas en La Linterna de Cope
Se nos está desbocando la historia. Si no teníamos bastante con la pandemia, con el Brexit, con el asalto al Capitolio… ahora, nevada histórica en gran parte de España, con Madrid aún bloqueada en parte por la nieve. No se veían concentraciones así de nieve en la capital desde los cincuenta del siglo pasado. Se baraja incluso pedir la declaración de zona catastrófica para la capital. No se habla estos días de otra cosa: El temporal Filomena es sin duda uno de los más agresivos que ha sufrido a España en los últimos años. Y nos hemos hecho la pregunta. ¿Cómo han influido nevadas como estas en la historia, y más en concreto, en la historia de España?
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Hablar de nieve en la historia nos lleva a las grandes batallas de las guerras napoleónicas, o las derrotas de Hitler o del propio Napoleón ante el “General Invierno” Ruso… Sin olvidar otros enfrentamientos que cambiaron la historia como la Batalla del Lago Peipus. Pero la nieve ha tenido también un efecto cultural fundamental, que se refleja en literatura, en pintura o incluso en música. En muchos lugares del mundo, la nieve es un compañero cotidiano del invierno. En España, es siempre noticia.
Carlos V, su Madre Juana la Loca y el futuro Felipe II pasaron las navidades de 1536 en Tordesillas, bloqueados por la nieve. Siglos más tarde, será bajo una intensa nevada en Madrid que sea asesinado en la calle del Turco, el general Prim. Pocas décadas más tarde, la batalla de Teruel pasará a la historia de la Guerra como quizás el momento más duro de la contienda. Ambos ejércitos tuvieron que enfrentarse, con temperaturas que llegaron a rondar los veinte grados bajo cero. La nieve da en España para mucho, y poco antes, en 1888 el norte de España vivía la Nevadona de los Tres Ochos, con unas cifras de concentración de nieve, y con una alteración de la vida en Asturias y Cantabria, totalmente inéditas.
Madrid -como capital de España- se convierte en nuestra imaginación en gran protagonista de los paisajes blancos. Ya sea el Madrid ligero pero pobre de comienzos del siglo (nos referimos a la gran nevada de 1904) o al Madrid necesitado y doliente de la postguerra. Ahora, la España del siglo XXI tiene su gran nevada, y con ella, todos hemos ganado historias que contar el día de mañana: Sobre la nieve y sobre tantas cosas en aquel comienzo de año loco de 2021.